Hospital de Día del IOHM: “Trabajamos por y para el paciente”

Hospital de Día del IOHM: “Trabajamos por y para el paciente”

Más de 80 pacientes reciben diariamente su tratamiento en el Hospital de Día del Instituto Oncológico Henry Moore (IOHM). En este espacio, cada uno recibe un trato personal y es contenido por un equipo altamente capacitado, preparado para brindar la mejor atención.

El Hospital de Día es el área de asistencia sanitaria del IOHM, donde los pacientes oncológicos reciben tratamiento ambulatorio. El objetivo es facilitar la atención y el tratamiento durante unas horas, sin ingreso hospitalario, potenciando una mayor autonomía y calidad de vida de las personas. “Los pacientes, en general, hacen el tratamiento y se van a sus casas, son muy pocos los que están internados en otros establecimientos”, explica el Lic. Eduardo Santos , jefe del Hospital de Día del IOHM y responsable de la organización del espacio. 

Con la órden del médico oncólogo tratante, el paciente llega con el turno asignado. La indicación médica se imprime y el paciente firma la planilla donde está detallado su tratamiento, que es supervisado por los médicos del Hospital de Día, para luego si es necesario, evaluar al paciente y controlar los resultados de estudios de laboratorio pendientes. Finalmente, el tratamiento es administrado por un equipo profesional capacitado y preparado para esta tarea.  “Este procedimiento se realiza cada vez que el paciente ingresa y una vez que está todo chequeado, se prepara la  medicación y comienza el tratamiento del día. Algunos duran una hora, otros hasta seis”, detalla Santos. 

El espacio está delimitado por boxes, cada uno con un sillón y un televisor. El paciente puede llevar su música o material de lectura; algo para beber y comer dentro de las recomendaciones de la dieta establecidas previamente. El tratamiento se realiza con acceso venoso periférico en la mano en la mayoría de los casos o bien con un catéter implantable. El equipo del Hospital de Día supervisa en forma constante observando el goteo, revisando que todo marche bien y verificando el estado de cada uno. 

En el Hospital de Día el equipo trabaja por y para el paciente, con el foco puesto en acompañarlo y brindarle la mayor calidad de atención durante este proceso, y también a su entorno. “Las familias necesitan tranquilidad y saber que el paciente está bien”, dice Santos y explica que “la mayoría hace el tratamiento, lo finaliza y se va sin incurrir en ninguna reacción, y a medida que avanzan la incertidumbre se disipa”.

“La primera vez son todos temores, por eso nos tomamos el tiempo necesario para explicar qué implica el tratamiento, marcar pautas de alarma pero también para llevarles serenidad”, cuenta el Lic. Santos. “Queremos que el paciente tenga tranquilidad y sepa que, si el tratamiento se demora por algún motivo, lo importante es finalizarlo aunque lleve más tiempo”, resalta el Jefe del Hospital de Día y concluye:  “Nos centramos en la tranquilidad del paciente y las  familias y les hacemos saber que los tratamientos se hacen en las mejores condiciones y el paciente se va en las mismas condiciones en las que vino”.