Hospital de Día: al servicio de nuestros pacientes

Hospital de Día: al servicio de nuestros pacientes

El Hospital de Día es el área de asistencia sanitaria del IOHM, donde cerca de 100 pacientes oncológicos reciben diariamente su tratamiento ambulatorio con trato personalizado, a cargo de un equipo altamente capacitado. Contención, empatía y escucha atenta 

Con el objetivo de facilitar la atención y el tratamiento sin ingreso hospitalario y a la vez,  potenciando una mayor autonomía y calidad de vida de las personas, el Hospital de Día del Instituto Oncológico Henry Moore es el espacio donde los pacientes realizan su tratamiento y en pocas horas, se van a sus casas. 

Delimitado por boxes, cada uno dispone de un sillón y un televisor y es donde el paciente recibirá, con acceso venoso periférico en la mano en la mayoría de los casos, o bien con un catéter implantable, su tratamiento oncológico. 

Durante ese tiempo, también puede leer, escuchar música, beber y comer dentro de la dieta establecida previamente. Todo bajo la atenta mirada del equipo del Hospital de Día, que supervisa en forma constante observando el goteo y revisando que todo marche bien. 

En el Instituto Oncológico Henry Moore somos pioneros en el tratamiento ambulatorio y estamos comprometidos con el paciente y la familia, para brindar la mayor accesibilidad a una atención de máxima calidad, donde la relación médico-paciente está basada en la honestidad. 

Con esa premisa, en el Hospital de Día el equipo trabaja por y para el paciente, con el foco puesto en acompañarlo y brindarle la mayor calidad de atención durante este proceso, y también a su entorno. 

El Hospital de Día se maneja a través de procedimientos claros para que, al ingresar el paciente y luego de chequear que todo esté en regla, pueda comenzar con la administración de la medicación del día. 

Con la órden del médico oncólogo tratante, el paciente llega con el turno asignado. La indicación médica se imprime y el paciente firma la planilla donde está detallado su tratamiento, que es supervisado por los médicos del Hospital de Día, para luego si es necesario, evaluar al paciente y controlar los resultados de estudios de laboratorio pendientes. Finalmente, el tratamiento es administrado por un equipo profesional capacitado y preparado para esta tarea.  

Si bien la primera vez pueden aparecer los temores lógicos, en el IOHM nos tomamos el tiempo necesario para explicar qué implica el tratamiento, marcar pautas de alarma y llevar serenidad. 

Nos centramos en la atención y en la tranquilidad del paciente y sus  familias y sostenemos el derecho a acceder al mejor tratamiento probado y con la mayor evidencia científica.